El
precio del vino es el principal factor que influye en la decisión de su
compra en las grandes superficies de Cataluña, según un estudio
realizado en la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona (URV). Después
de éste, el trabajo apunta a la importancia de haberlo probado
anteriormente, el maridaje con el tipo de comida prevista y la DO del
vino en cuestión. Por detrás de estos factores hay otras variables, como el hecho de aparecer en medios de comunicación y prensa especializada. Por último, el estudio constata aún el gran camino que tienen los
vinos catalanes ante vinos procedentes de otras denominaciones de origen
españolas que tienen un mayor grado de conocimiento o de implementación
en las grandes superficies comerciales. Todo
ello se desprende del estudio «Proyecto de investigación sobre los
principales factores influyentes en la decisión de compra de vino por
parte del catalanes. Implicaciones
para la DO Tarragona», dirigido por el profesor de marketing de la
Facultad de Economía y Empresa de la URV en Reus, Jaume
Gené Albesa, con la colaboración de Christophe Marquet profesor de
marketing en la Facultad de Enología de la URV en Tarragona y Director
Comercial de Covides.
Factores que influyen
Para la realización de este estudio se han realizado más de un millar de encuestas de campo a clientes que compran vino en las principales cadenas de grandes superficies, supermercados e hipermercados de Cataluña. El trabajo se ha hecho en las ciudades de Barcelona, Tarragona, Lleida y Girona. Según el doctor Gené «el objetivo del estudio es ofrecer a las bodegas y a las cooperativas vitivinícolas catalanas datos significativos para el momento de implementar nuevas estrategias comerciales».En primer lugar, indican que el precio es el que más influye a la hora de elegir un vino. El segundo factor se refiere a la inercia de comprar un vino que ya se ha probado, manteniendo la fidelidad a un producto conocido. La comida con el que se quiere acompañar la comida es la tercera variable. La DO es el cuarto elemento influyente. Por último, entra en juego la aparición en prensa, revistas y blogs especializados y libros sobre vinos.Todos estos factores varían sensiblemente dependiendo de la edad del consumidor y de su nivel de ingresos. Así, se ha puesto de manifiesto la relación estrecha entre los más jóvenes y los mayores con los vinos más económicos y más fáciles de beber como son los blancos y rosados. El grupo de edad de 35 a 64 prefieren el vino tinto y tienen más cultura vitivinícola, y el vino rosado está relacionado con los encuestados atraídos por niveles de precio más bajos.
La notoriedad de la Denominaciones de Origen
Respecto la notoriedad de las denominaciones de origen de fuera de Cataluña, es abrumador el conocimiento que se tiene de Rioja. Entre las tradicionales también figura Ribera de Duero y resulta sorprenden como DO poco tradicionales, como Rueda o Somontano, ocupan lugares destacados en la lista de las más conocidas, subraya el estudio. Esto demuestra que las DO catalanas todavía tienen un largo camino por recorrer en nuestro país y especialmente en las grandes superficies comerciales, remarcan.Respecto las denominaciones de origen catalanas, según su grado de notoriedad se pueden observar tres grupos. Un primero con las más conocidas, formado por Priorat y Penedès; un segundo con el gran grueso de las DO catalanas por este orden: Montsant, Empordà, Terra Alta, Catalunya, Costers del Segre, Alella y Tarragona; y un último con dos mucho menos reconocidas en los establecimientos de venta, que son Conca de Barberà y Pla de Bages.
Factores que influyen
Para la realización de este estudio se han realizado más de un millar de encuestas de campo a clientes que compran vino en las principales cadenas de grandes superficies, supermercados e hipermercados de Cataluña. El trabajo se ha hecho en las ciudades de Barcelona, Tarragona, Lleida y Girona. Según el doctor Gené «el objetivo del estudio es ofrecer a las bodegas y a las cooperativas vitivinícolas catalanas datos significativos para el momento de implementar nuevas estrategias comerciales».En primer lugar, indican que el precio es el que más influye a la hora de elegir un vino. El segundo factor se refiere a la inercia de comprar un vino que ya se ha probado, manteniendo la fidelidad a un producto conocido. La comida con el que se quiere acompañar la comida es la tercera variable. La DO es el cuarto elemento influyente. Por último, entra en juego la aparición en prensa, revistas y blogs especializados y libros sobre vinos.Todos estos factores varían sensiblemente dependiendo de la edad del consumidor y de su nivel de ingresos. Así, se ha puesto de manifiesto la relación estrecha entre los más jóvenes y los mayores con los vinos más económicos y más fáciles de beber como son los blancos y rosados. El grupo de edad de 35 a 64 prefieren el vino tinto y tienen más cultura vitivinícola, y el vino rosado está relacionado con los encuestados atraídos por niveles de precio más bajos.
La notoriedad de la Denominaciones de Origen
Respecto la notoriedad de las denominaciones de origen de fuera de Cataluña, es abrumador el conocimiento que se tiene de Rioja. Entre las tradicionales también figura Ribera de Duero y resulta sorprenden como DO poco tradicionales, como Rueda o Somontano, ocupan lugares destacados en la lista de las más conocidas, subraya el estudio. Esto demuestra que las DO catalanas todavía tienen un largo camino por recorrer en nuestro país y especialmente en las grandes superficies comerciales, remarcan.Respecto las denominaciones de origen catalanas, según su grado de notoriedad se pueden observar tres grupos. Un primero con las más conocidas, formado por Priorat y Penedès; un segundo con el gran grueso de las DO catalanas por este orden: Montsant, Empordà, Terra Alta, Catalunya, Costers del Segre, Alella y Tarragona; y un último con dos mucho menos reconocidas en los establecimientos de venta, que son Conca de Barberà y Pla de Bages.
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